15 Oct Crisis de los contenedores: causas y soluciones
Los contenedores de transporte marítimo constituyen una de las piezas más importantes de la economía mundial. Son las herramientas que hacen posible un 80 por ciento de todo el comercio del mundo y dan soporte logístico a la gran revolución del e-commerce o comercio electrónico, que está en pleno auge. Sin embargo, desde 2020, se vive la conocida como “crisis de los contenedores”: se han vuelto escasos y cada día son más caros.
Como consecuencia de esta crisis, los fletes marítimos han multiplicado por más de cuatro su precio, lo que está encareciendo notablemente todo tipo de productos que consumimos. Para que te hagas una idea, antes de la pandemia de COVID-19, enviar un contenedor desde China a Europa o Estado Unidos costaba alrededor de unos 4000 dólares. Actualmente, este servicio cuesta más de 20 000.
Dados estos aumentos de precios, no es difícil pensar que la recuperación de la economía mundial está viéndose amenazada de forma muy directa.
Causas de la crisis de los contenedores
Para que entiendas las causas de la crisis que vive el sector del transporte marítimo, hay que remontarse a principios de 2020. En ese momento, se disparó el comercio electrónico en todo el planeta, al tiempo que muchos puertos permanecían cerrados o trabajando bajo mínimos por culpa del coronavirus.
Esta situación produjo un colosal atasco en el tráfico de contenedores que todavía, año y medio después, no se ha resuelto. Este atasco ha afectado sobremanera a China, principal potencia manufacturera del planeta y el país que más exporta y que, por tanto, más depende de estos grandes contenedores. Allí, en los puertos chinos, es donde el problema se manifiesta de una forma más virulenta, afectando a su vez al resto de países con los que comercia el gigante asiático.
A raíz de esta situación y otras que te mencionaremos a continuación, el precio de los contenedores no ha parado de crecer.
1. Inesperado aumento de la demanda
Con la llegada del coronavirus y los confinamientos, el comercio electrónico inició un incremento sin precedentes que, aunque atenuado, todavía dura. Durante 2020, el e-commerce facturó un 27,6 por ciento más que el año anterior, superando los 4,2 billones de dólares de ingresos. Este formidable incremento de la demanda sorprendió al sector logístico, que no pudo disponer de suficientes contenedores para dar respuesta a tantas compras.
2. Fuerte reactivación y sobreabastecimiento
A medida que la primera ola de la pandemia pasaba, las economías mundiales iniciaron una sólida recuperación que todavía disparó más el consumo. Además, muchas empresas de todo el mundo aumentaron sus pedidos de materiales y componentes de todo tipo en previsión de nuevas oleadas del virus.
3. Fallos logísticos
El factor sorpresa ha jugado en contra del sector logístico, haciendo que muchos contenedores no estén donde deberían. Un informe de UNCTAD, la Agencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo, señala que la emergencia sorprendió a muchos contenedores en lugares donde no tenían utilidad. Mientras tanto, otro buen número de ellos pasa más tiempo del que debería en los barcos, porque estos no pueden descargar debido a los retrasos que provocan las restricciones por el COVID-19 en muchos puertos.
4. Falta de cargas de retorno
La demanda de productos chinos es muy fuerte, pero no hay un flujo similar de vuelta hacia China. Eso hace que una gran cantidad de contenedores viajen vacíos hacia ese país, lo que hace que resulten más caros, ya que viajan sin una mercancía que amortice su precio. Esto afecta especialmente a rutas como las que unen Sudamérica con China.
5. El papel de las navieras
Algunos agentes del sector, como la Asociación Española de Profesionales del Comercio Exterior (Acocex), señalan a las navieras, que habrían reducido frecuencias para mejorar sus márgenes comerciales con precios más altos.
6. Atasco en las fábricas de contenedores
Los fabricantes de cajas para transporte marítimo tampoco dan abasto. De hecho, muchas fábricas ni siquiera admiten pedidos.
7. Evergreen
Por si fuera poco, a mediados de verano, el gigantesco portacontenedores Evergreen encallaba en pleno Canal de Suez, cortando el tráfico de esta vía principal durante varios días. Como consecuencia, se produjo un nuevo aumento de precios en los fletes.
Soluciones para la crisis de los contenedores
Ante el riesgo que esta emergencia supone para la economía mundial, gobiernos, instituciones supranacionales y empresas de logística proponen soluciones. Así, algunas navieras están reciclando contenedores que habían descartado ya o que tenían en venta.
Además, la UNCTAD ha elaborado un decálogo de medidas para agilizar nuevamente el comercio y desbloquear la situación. Entre sus propuestas, el organismo de Naciones Unidas pide a los países que garanticen en todo momento los derechos de tránsito de los buques. También pide que hagan esfuerzos para mantener los puertos abiertos y seguros y que reduzcan la burocracia que afecta a cargas y descargas.
Por otra parte, muchos observadores confían en que esta escasez de contenedores vaya remitiendo a medida que las alteraciones producidas por la pandemia también se diluyan. Así, cuando el comercio electrónico recupere sus niveles normales, la logística debería recuperar la calma.
Mientras tanto, el sector busca diferentes vías para dar solución a esta crisis de los contenedores. En ese sentido, las empresas especializadas en la gestión de transporte marítimo están jugando un papel fundamental para que el comercio vuelva a fluir con normalidad y las compras de millones de personas lleguen a su destino a tiempo, sin que los precios se disparen de nuevo. En Tracosa podemos ayudarte con nuestros servicios de asesoría en logística y aduanas. ¡Contacta con nosotros!